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Convocatoria séptimo volumen

 

Poesía - Cielos despejados

La madrugada de hoy es la última que te dedico. 

Estas últimas lágrimas son para ti y tu sonrisa, son para tus ojos, son para tus palabras, son para tus besos. 

Quiero apoyar mi cabeza una última vez en tu hombro, quiero que el cielo se despeje de una buena vez. 

Quiero que te vayas como lo hizo nuestro café preferido, quiero que estés mejor de lo que estabas conmigo, quiero que el frío nunca llegue a ti, quiero que tu cuerpo sea arropado por otro suéter tejido que no sea el mío. 

Me di cuenta de que tu "adiós" no tiene significado alguno, que no hay un mensaje secreto tras el0, solo era un adiós simple, un adiós sin despedida larga, un adiós sin ti, un adiós sin mí. 

Besé y recé tu nombre por 365 días, 

Besé y le recé a tus manos por cuatro años. 

Besé y le recé a nuestra despedida. 

Y al final, nada de eso hizo que te quedaras. 

No te veré allá, no te esperaré, no te buscaré y no pasaremos diciembre juntos así tenga que enfrentar los edificios, los cielos, los árboles, los autos, todo lo que está entre tu y yo, así tenga que enfrentarme a mí, a mis sueños, a mis lloriqueos, a mis anhelos y a mis desvelos; dejaré de verte, de esperarte, de buscarte y extrañarte por más que me carcoma el corazón en las noches. 

Sé que nos amamos tanto que tuviste que decírmelo despacio mientras te abrazaba antes de llegar a casa. 

Te hubiera preferido una última vez antes de llegar a mi cumpleaños, te hubiera ido a buscar antes de que arribaras de nuevo a mi corazón, te hubiera necesitado para todo si dejabas que me quedara en el sillón de tu casa, te llevaría conmigo para conocer a mamá si tan solo hubieras dejado tu mano un segundo más aquella vez en el concierto. 

Donde quiera que vayas te mandaré mi amor. 

Donde quiera que vayas habrá un beso en la frente para que continúes sin miedos. 

Mi cielo, lo siento por despejarte, pero no puedo esperar tu eterno verano cuando estamos en invierno. 

Mi vida, lo siento por quitarte de mis sueños y volver a ponerme como prioridad.

Cariño, perdón por acabar con nuestra palabra favorita para agregarle "mutuo" y no "nuestro". 

Dejaré de extrañarte, lo prometo por ti y por mí, sobre todo por mí.

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