- Get link
- Other Apps
Te veo cada vez más bella, a pesar de la radiante blancura de tu resplandor, iluminas todo con sutileza, y las tenues sombras contrastan con mi bohemio sentimiento al verte; tanto así que me haces despedir suspiros, como los vapores de una olla cuando mamá cocina.
Me haces congelarme como si en ti viese alguna asombrosa visión, pero, lo cierto es que me pierdo en tu dulce luz amiga mía. Te admiro con sinceridad, estando así, elevada y tierna, que me dan ganas de ser cual celestial para a abrazar la magnitud de tu ser y acariciar con besos suaves el aroma de tu piel, como aquel que da sorbos al mezcal.
Por mucho tiempo he guardado este sentimiento hacia ti divina, pero me desbordo por dentro al pensarte, y con elevada probabilidad me terminaré por derramar, me consumiré al verte como la cera al calor. Salvaje estupor, fiero tornado, latidos tan agitados como un océano bajo tormenta.
Amada mira con profundidad y sondea mis intenciones, observa y confirma que esto no es solo un efímero sentimiento. ¡Oh amada amiga! Pues es para mí una necesidad el amarte.
Aparentemente fuerte y con mucha voluntad, pero, bajo el efecto de tu presencia me siento como un débil sin libre albedrío, como si la divina Providencia me hubiese destinado a darte mi ser como pago por tu inconmensurable bondad y hermosura.
Salgo a mi solitaria caminata para reflexionar, y de repente cual arrebato noto tu rastro. Deslumbras todo, lo que tocas ha de quedar con algún brillo, como reflejo de luna sobre el agua.
Hemos de amarnos, hemos de vivir amalgamados, hemos de ser eternos en memorias, hemos de besar mutuamente nuestras almas a sorbos, hasta que llegue el día que nuestro polvo deba también unirse.
Para: ti, aún desconocida en apariencia.
Comments
Post a Comment