Skip to main content

Posts

Showing posts from February, 2020

Convocatoria séptimo volumen

 

Convocatoria quinto volumen

Poesía - Nostalgia

Estoy nostálgico. El canto de las mariposas no regreso. Lentamente el día se pierde, entre recuerdos. Recuerdos que dejo mi sol, Se ha ido esta mañana, al sur. Una luz llego a mi ventana, Trajo camelias entre esperanzas, Cantando a mi corazón. Nostalgia, La vida se esfuma en segundos.

Poesía - El sonar de las cantaras - III

III Las cantaras de los árboles (Llega la tarde. Los trinos anegan los oídos) Se encaraman los árboles sobre los tordos, los canarios y las garzas, trinando sobre sus lomos. ¿Los árboles tienen patas? Sí, porque llovió. La luz descalza camina sobre el barro, con pasos de ciempiés, directo al fogón, a tomar café, porque sopla frío y provoca arroparse. Los guineos se agazapan a los pies del invierno porque no se sabe si se irá en un rato luego que floreé el cedazo, el tarare, el tomate y el ají. ¡Se encaraman los árboles y trinan de raíz!

Poesía - El sonar de las cantaras - II

II   Las cantaras de las semillas (En la tierra las semillas hacen fiesta. La humedad se sumerge varios metros) Tardíamente fue sembrado el maíz en el surco por segunda vez ¿Nacerá? ¡Segurooo! Después del primer día. Lanzará gritos al nacer como un nido de pollos. Tocaremos con el oído el suelo para oír los cantos del rocío que estrujan las semillas que rompen sus corazas. Tardíamente, tras un segundo parto, vuelve a chorrear la lluvia atravesando los campos de auyamas y batatas e inundando gallineros. Alguien dirá: “ La vida es corta, pero la lluvia la alarga” Mientras los perros ladran y gusanos se esconden en el matorral, en un mes amarillo, fue sembrado el maíz en huecos. ¡Ñaaa! ¡Ñaaa! ¡Ñaaa! Mañana temprano nacerá alimentado con leche del cerro.

Poesía - El sonar de las cantaras - I

I   Las cantaras de las nubes (Se abre el cielo y rompe a llover fuertísimo. Aparecen personajes goteando) La lluvia cae y rebota hacia arriba formando pelotas de aire, con charcos de nubes y ríos de vientos. Unos peces alados ¡Seguro son golondrinas, o tordos, o canarios, o garzas que nadan comiendo flechas! se desnudan en sus aguas, moviendo sus rabos, dulces y salados que llueven rápidos directo hacia el mar. Un poeta mira mojado desde abajo, de ojos y cejas empapadas, con las ropas tendidas en alambres sin sol. Un poeta niño, hombre, mujer; una mujer laguna que navega contra todo por las grietas de los patios. ¡La lluvia cae devolviendo a la tierra las gotas lanzadas!

Poesía - Ya no existo

No me siento yo mismo, Tomo asiento para correr de mi realidad, Pero, me envuelve el egoísmo. Me come, traga y escupe. Siento que ya no existo. Por un minuto más, Respiro sin quererlo lograr, Continuando este vicio maldito. Siento que ya no existo. Ahogado en un reflejo vacío, Pierdo la voluntad de no estar Y renazco en repetitividad, Como el ave al fuego. Siento que ya no existo. Intento combatir mi ira incontenible Contra nadie. A ciegas y en silencio. Sólo para darme cuenta de que pierdo. Siento que ya no existo. Como un parpadeo efímero, Dejo de ser yo, Soy él. Arrastrándome el orgullo, Mi mente saboteada, Sólo puede con uno a la vez. ¡Y siento que ya no existo! Ropa sucia arrojada en un rincón, Espectador esclavizado, Muero en mi agonía infinita, Para levantar mi cadáver Al siguiente amanecer.

Poesía - Estuvimos

Estuvimos a un paso de lo real, A lograr lo imposible, Y convertir lo fantástico, en una vida o dos. Estuvimos a un beso de ser, Un solo latido, Al ritmo y color del arte. Estuvimos a un momento, De estar tomados por las manos Suaves y cálidas del alma. Estuvimos a pestañeos, De soñar despiertos Y no despertar jamás. Estuvimos a una caricia, Entre brazos, De contar la eternidad. Estuvimos a una despedida alargada De probar la magia de la luna, Bajo el mismo respiro. Estuvimos a un oleaje, De escapar a la tormenta, La oscuridad que carga. Y nadar en las aguas del presente. Estuvimos a un espacio entre días De llamarte por mi nombre, Para fundirnos en el sol. Estuvimos a un par de amaneceres, Perdidos entre miradas, De brillar como girasoles de Van Gogh.